miércoles, 3 de octubre de 2012

   ENTREGA DE ALMA

    Que utopía que tu nombre sea el mio
     cuando lloro oscurecida de tu piel.
      LILIANA VARELA

 Es verdad, que en juegos entre sombras
en las sedas se desliza nuestra piel,
y con ansias se pronuncia lo que nombras
la palabra "amor" con su sabor a miel.

No es lejana ni utópica, esa melodía
cuando vive escondida por dentro del amor
y brota en un suspiro que vuela cada día
confundiendo al placer con el dolor.

El amar y sufrir, en el alma,  nunca  acaba,
queda el dolor cuando se va la hora,
y se tiene que marchar donde la vida daba
el aliento de amor que nace en cada aurora.

Entonces, porque ahora te miro y te sonrojas
si digo que  amo con pasión a tu alma pura
acaso Dios no ama lo verde de las hojas
o acaso no es mi amor sin querer, una locura.

Dime.., si en cada amanecer en el silencio mismo
no escuchas voces que murmuran sin sus calmas,
están ansiosas de salirse del profundo abismo
para fundir los cuerpos.., y entregar las almas

JESUS ALBO

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